Comunidad Tres Ombúes denuncia avance del negocio inmobiliario en Sitio Sagrado
La comunidad multiétnica de Tres Ombúes resguarda un sitio donde hallaron más de 5 mil piezas de los Pueblos Querandí, Guaraní y Chana. Es una zona de humedal en lo que hoy se conoce como la localidad de La Matanza en la Provincia de Buenos Aires. Sus integrantes denuncian la construcción de edificaciones clandestinas desarrolladas ilegalmente en zonas arqueológicas.
La falta de acceso a la tierra y la vivienda en el conurbano bonaerense, es uno de los componentes que complejizan el resguardo territorial, donde grupos oportunistas comercializan lotes destruyendo zonas arqueológicas y vendiendo terrenos de manera irregular o fraudulenta. Delia Claro, integrante del Pueblo Colla en diálogo con Infoterritorial cuenta que “grupos que se manejan como mafias, lo que hacen es lotear y vender a 10 mil dólares o 5 mil dólares, haciéndose los dueños cuando no lo son. Se agarran el dinero y la gente obviamente empieza a querer construir, a rellenar. Y acá tenemos varios espacios así en lucha.” Del área preservada que originalmente comprendía alrededor de 110 hectáreas, actualmente sólo quedan 20 hectáreas.
Denuncias y situación legal
Tres Ombúes fue reconocida como comunidad multiétnica por el Consejo Provincial de Asuntos Indígenas (CPAI), que depende de la Subsecretaría de Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires, esto les permitirá que continúen los trámites para que se les transfieran las tierras donde se realizaron los hallazgos.
La abogada Paula Mercedes Alvarado Mamani quien pertenece al Pueblo Colla e integra la comunidad Tres Ombúes explica que “existe una medida cautelar dictada en el 2017 por el Juzgado Federal de San Martín que prohíbe las construcciones, es una medida de no innovar. Esta medida en el 2021 fue ampliada por el Juez Federal de Morón a otros sectores amplios, a otros sectores del territorio.” Aún así las construcciones ilegales continúan avanzando. “La consecuencia es que debido al barrio popular en el sector que formaba parte del territorio protegido y otros usos indebidos del previo, existe no solamente la cuestión territorial, sino contaminación ambiental. El sitio sagrado se encuentra bastante desprotegido en ese sentido” amplía Alvarado Mamani. El juez en diciembre del 2023 reiteró la medida cautelar de no innovar pero solamente al sitio sagrado. Y agrega “Nosotros hicimos también una denuncia en el marco de la causa de la ACUMAR (Autoridad Cuenca Matanza Riachuelo) y el año pasado en una audiencia pública nos volvimos a presentar y solicitar, exigir el cumplimiento por lo menos de las cuestiones ambientales”.
Resistencia y memoria ancestral
Según crónicas de la época, los Querandíes se retiraron a la lomada donde estaban los ombúes en 1536 tras un ataque de la expedición de Pedro de Mendoza en la fundación de Buenos Aires. A orillas del hoy conocido bajo el nombre Río Matanza, los soldados asesinaron alrededor de mil indígenas y las comunidades tras organizarse con otros pueblos vencieron a los españoles en lo que se conoció como el combate de Corpus Christi.
Desde hace más de 15 años indígenas de distintos pueblos se reúnen para preservar la zona como un espacio natural, cultural y sagrado. Hoy integrantes de los Pueblos Colla, Diaguita, Qom, Aymara, Guaraní, Mapuche y Quechua integran la comunidad y trabajan para la protección del sitio arqueológico. Si bien desde hace tiempo venían realizando ceremonias al costado de la ruta, en el año 2015 realizaron por primera vez dentro del predio la ceremonia Kapak Raymi (solsticio de verano), celebrada por los pueblos andinos.
En aquella lomada relata Delia Claro que “Se hallaron alrededor de 5 mil piezas de querandíes tiestos de cerámica, boleadoras, puntas de flecha, restos líticos, se han extraído y se encuentran en diferentes museos. Y nuestra intención también es construir un museo autónomo, autóctono dentro del territorio para que vuelvan esas piezas y puedan ser vistas por todo lo que habitamos en La Matanza también. Las escuelas vienen al territorio, las universidades vienen al territorio.”
Hace unos años en un avance inmobiliario, fueron encontrados también huesos humanos en la zona donde estaban los tres árboles de ombú. Cuenta Claro: “En esa removida, se encontraron huesos que para nosotros podrían haber sido sobre la última dictadura militar, porque nosotros tenemos enfrente El Vesubio y Puente 12. O pudo haber sido de los hermanos querandíes. Pero bueno, todo quedó en la nada porque no hubo una intervención, ni siquiera por la denuncia que habíamos hecho. Y la gente que construye en ese lugar los ha retirado, vaya a saber lo que hicieron. Los taparon, construyeron sobre eso. Así que no, no pudimos ingresar. No nos dejaron pasar. Me acuerdo que en ese momento habíamos ido con Pablo Pimentel.” de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de La Matanza.
Actualmente el trabajo arqueológico se encuentra detenido. “El último arqueólogo que tenía el permiso para poder seguir realizando algunos trabajos, es Marcelo Wessel, que no pudo hacer su trabajo porque la gendarmería no permitió el ingreso.” relata Delia. En un gesto de resistencia, resiliencia, y compromiso con las generaciones venideras actualmente la comunidad multiétnica Tres Ombúes que se sostiene autogestivamente realiza talleres de huerta, de charango y de lenguas originarias al tiempo que mantienen los trabajos y recorridas para resguardar el territorio del ilegal avance inmobiliario.
✍ Romina Lema
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